Duración del proceso
No hay que llegar a ningún sitio, tan solo comenzar a andar.
La duración del proceso depende de cada caso. No obstante, inicialmente es recomendable hacer unas 8 sesiones, para poder ver cambios. Para las primeras 5 o 6 sesiones es recomendable que la frecuencia sea semanal. El hecho de sugerir un número mínimo de sesiones simplemente es por un motivo: algo que se ha “torcido” durante toda tu vida no se va a enderezar en una hora. El trabajo personal, es una carrera de fondo, donde la constancia es la clave. Correr mucho, tomar atajos, suele darnos una solución temprana pero que no suele ser duradera en el tiempo.
Como hemos comentado en la primera o segunda sesión es recomendable pactar cada cuantas sesiones haremos una sesión de control. Estas sesiones de control son buenas para no perder la perspectiva del porqué has venido, y además observar cómo se está desarrollando el proceso respecto al objetivo que fijamos. El objetivo se podrá mantener o quizá decidas cambiarlo. También hablaremos de cómo nos estamos sintiendo en el proceso por si hemos de realizar algún ajuste. Sentirse cómodo y seguro es fundamental para poder transitar el camino.